Señales de que tu cerradura necesita ser reemplazada
Las cerraduras son el principal punto de acceso a cualquier vivienda, y su correcto funcionamiento es esencial para garantizar la seguridad del hogar. Sin embargo, con el paso del tiempo, el uso diario y factores externos como la humedad o la suciedad pueden afectar su rendimiento. Identificar a tiempo cuándo es necesario reemplazar una cerradura puede evitar contratiempos mayores o situaciones de riesgo.
Dificultad para girar la llave
Una de las señales más comunes de desgaste es notar que la llave ya no gira con suavidad. Si hay que aplicar fuerza para abrir o cerrar, es probable que el mecanismo interno esté dañado o desgastado. Esta situación no solo incomoda, sino que puede llevar a un bloqueo repentino de la cerradura.
Juego o movimiento en el bombín
Si el bombín tiene holgura o se mueve al introducir la llave, es una clara señal de que algo no va bien. Una cerradura firme transmite seguridad; si notas que algo “baila” al manipularla, lo mejor es hacer una revisión lo antes posible.
Oxidación o signos visibles de deterioro
Las cerraduras expuestas al exterior —como en portales, patios o trasteros— pueden mostrar signos de óxido, corrosión o suciedad acumulada. Estos elementos afectan directamente al mecanismo de cierre y, con el tiempo, pueden bloquear por completo el acceso.
La llave se atasca o se queda dentro
Cuando la llave se queda atrapada o cuesta extraerla, es una señal clara de que el sistema interno no está en buen estado. Forzar la salida solo empeora la situación, pudiendo romper la llave dentro del bombín.
Has sufrido un intento de robo
Tras un intento de forzado, aunque la cerradura siga funcionando, es fundamental sustituirla. El mecanismo puede haber quedado debilitado o manipulado, lo que compromete su integridad ante futuros intentos.
En cerrajeros Valencia ofrecemos servicios de revisión y sustitución de cerraduras tanto preventivos como de urgencia. Contar con un sistema de cierre en buen estado no solo evita molestias, sino que garantiza una barrera real ante accesos no autorizados.
Conclusión
Las cerraduras no duran para siempre, y su desgaste puede pasar desapercibido hasta que ya es tarde. Estar atento a los pequeños síntomas es clave para anticiparse a los problemas. Si detectas alguna de estas señales, lo más recomendable es contactar con un cerrajero profesional que valore el estado del sistema y proponga la mejor solución.